Un lavado de cara suele implicar sólo cambios menores. Este es también el caso del BMW X1 xDrive25d a primera vista. Pero hay algo más en la revisión del F48. Aunque sólo sea sutilmente, el SUV compacto se ha mantenido fresco en puntos relevantes. Más información en el informe de la prueba a largo plazo. En el concesionario Crestanevada de coches ocasión Madrid, encontrarás el coche de tus sueños al mejor precio.
Cambios discretos pero esenciales en la parte delantera
Los cambios visuales se encuentran principalmente en la parte delantera. Los faros antiniebla perforados en la carrocería han desaparecido. Se han sustituido por tiras de LED insertadas en las tomas de aire. Y lógicamente, el riñón ha crecido, qué más. Pero queda bien en el F48 LCI. Otro cambio se encuentra en la parte trasera, donde BMW afirma haber modificado el faldón. Sin embargo, esto no es realmente visible. Sólo los tubos de escape, que han crecido de 70 a 90 mm de diámetro, indican un cambio. El mayor cambio para el conductor es probablemente la pantalla táctil, que ahora mide hasta 10,25 pulgadas. Pero eso es todo en cuanto al tamaño, porque detrás sigue estando el sistema operativo OS 6.0.
Impresión de conducción BMW X1 xDrive25d (F48 LCI)
Bajo el capó del BMW X1 xDrive25d hay un turbodiésel de 2,0 litros. El más potente, para ser exactos. Al mismo tiempo, esta variante también cumple actualmente la última norma de emisiones Euro 6d. El par inicial de 450 Nm hace que el X1 sea relativamente económico en el uso diario. Se puede conducir con 5,3 l/100 km. Sin embargo, si se exprimen los 231 CV, el consumo aumenta en consecuencia. Así que definitivamente hay reservas de potencia. Este motor está preparado para todas las eventualidades. Incluso la capacidad de remolque de dos toneladas no supone ningún problema. Es difícil de creer, pero el Sport Steptronic marca una gran diferencia en comparación con la transmisión automática habitual. Lea más sobre ello en nuestro reportaje de conducción en vídeo.