La idea de «producir un gran contenido» puede ser un poco vaga. Usted ha leído artículos que lo pregonan. Los mejores en el negocio han discutido cómo el marketing de contenidos es exactamente donde está. Sabes que es importante. Sabes que debe centrarse en tu audiencia, ser interesante y estar lleno de palabras y frases clave. Lo has intentado varias veces, con poco que mostrar, poca retroalimentación. ¿Te has equivocado en algún punto? ¿Tan poco interesante era tu redacción o la voz de tu creador de contenidos?
La verdad es que la respuesta a todas estas preguntas es importante, pero probablemente no apuntan a la razón por la que su contenido no generó tanto éxito como usted quería. Su contenido debe ser reflexivo, bien investigado, consciente de sí mismo y dedicado a responder a las preguntas que tiene su público objetivo específico. Pero aunque conozca las necesidades de su público, ¿sabe qué preguntas se hace? Y lo que es más importante, ¿sabe por qué se hacen esas preguntas? ¿Sabe qué tipo de estilo de vida llevan que les lleva a buscar esas cosas específicas? ¿Por qué les ha llevado a leer tu contenido?
LO PRIMERO ES LO PRIMERO: ¿CÓMO ERES DE REFLEXIVO?
¿Te gusta estar sentado un viernes por la noche, disfrutando de buena comida y grandes amigos? A nosotros también. Cuando se trate de su contenido, pregúntese lo mismo sobre su audiencia, señala la agencia de publicidad Leovel. ¿Es un ejecutivo de alto nivel que se sube a un avión constantemente, que recibe miles de contenidos por correo electrónico, Internet y los medios de comunicación a diario? Haga que el suyo sea diferente tomándose el tiempo necesario para entender a esta persona: si tiene hijos, si lleva marcas de diseño, si cree en el trabajo duro y, por tanto, si desea contenidos que también tengan estos ideales.
Tal vez su público actual sea la persona mencionada anteriormente, pero usted quiere dirigirse a las madres que trabajan desde casa, que pasan el tiempo en las redes sociales cuando los niños duermen la siesta, que necesitan recetas para una cena de 10 minutos. ¿Esta persona está muy ocupada, concentrada y quizás estresada? Asegúrese de que su contenido es agradable, fácil de leer y creativo.
Antes de desarrollar una estrategia de contenidos, también es imperativo asegurarse de que usted o su creador de contenidos está educado sobre la demografía de su audiencia. Muchos redactores de contenidos ajenos no comprenden los rasgos de personalidad, los estilos de vida y los datos básicos del público para el que están creando contenidos. Por ejemplo, si su contenido tiene que llegar a un público de empresarios jóvenes e independientes, busque los rasgos comunes de estos empresarios, desde si la mayoría son hombres o mujeres hasta en qué ciudades residen mayoritariamente. Profundice y averigüe por qué esos empresarios viven en esas ciudades. ¿Qué les ofrece la ciudad a ellos y a sus negocios? Esto puede parecer una sobrecarga de información innecesaria, pero en realidad arroja luz sobre el núcleo de su público. Investigando, buscando, entendiendo y relacionándose con el núcleo de lo que compone tu audiencia, empezarás a saber exactamente lo que buscan y cómo tu contenido y/o negocio puede proporcionarles una forma de encontrarlo.